jueves, 31 de diciembre de 2009
martes, 29 de diciembre de 2009
lunes, 28 de diciembre de 2009
domingo, 27 de diciembre de 2009
"El páramo de huesos" (fragmento)
Alto sitial de angustia.
Devoro pan impío, piedra de soledad incorruptible
Escarnio son las alas
si es libertad batirlas bajo la ubicua trama de una alevosa red,
que nadie, astuto, burla, y al cabo nos apresa;
al filo de algún ojo de implacable perfidia
que el corazón percibe como el feroz acecho de un verdugo infinito.
Sufro en mi acantilado
soportando la injuria de una hiel incisiva que me cala hasta el núcleo,
de una sal rencorosa
que al sazonar mi tierra leuda mis elementos para un cárdeno rito.
Desertar no pudiera
bajo el código astuto del tirano que me inscribe en su pavorosa geometría,
no tan rígida aún
que el viento del terror no erice el polvo en el cuadrante vivo del esclavo,
la víctima, el hereje.
Rodeado por las algas
fanáticas de un numen que inciensa mi condena con bálsamos atroces,
muerdo la voz, como una gran navaja de hielo y desventura,
con el arrojo infausto del héroe abandonado en el desastre.
Peor que solo en la noche fronteriza del caos.
Asistido en el trance por alguien que es yo mismo del revés, en mi ausencia;
arrastrado a una cita quizá con el fantasma que habita mi reverso,
sin oír los sollozos de aquel íntimo arcano forzado a ser mi guía,
forzado a custodiar mi lámpara de sangre,
arriesgo el alma al filo de algún nefasto arrullo
entre el coloquio estéril de la lengua y el eco.
Alguien llama en el quicio pero se desvanece.
Sin duda
no merezco aun la mano cuyo fervor perverso fundiría el cordaje.
Debo cegar primero es ternura en flor, viciosa por tardía,
que hace temblar mi polen desnudo al filo de la zarpa.
-- No, no hace el escudo al héroe
sino el íntimo temple del denuedo.
-- Quien persiga la gema final de su inocencia
persevere y acendre su quilate en el martirio.
Acaso deba absorber de pie mi propia muerte,
hasta exaltar mi sino sobre la oscura ley fanática del mártir,
para dar a mi vida un alto destino de campana.
Me abismo en la consigna. Debo alcanzar el don aciago.
Lo quiere el corazón, probado en las más crueles latitudes del hombre,
penitente en los climas extremos del peligro, del éxtasis y el caos.
Desde el abrupto amor
con garras y delicias de un arduo paraíso contiguo a la locura,
hasta la soledad quemante del hereje sembrada de agonías;
desde el pavor del dédalo sin dios, cavado a dientes y uñas contra el mundo,
hasta la cumbre altiva de una alegría astral, lindera al sacrilegio.
Jorge Enrique Ramponi
miércoles, 23 de diciembre de 2009
domingo, 20 de diciembre de 2009
martes, 15 de diciembre de 2009
lunes, 14 de diciembre de 2009
muriendo, muriendo.hoy fue una despedida.
esta vez si.
la próxima vez que me llames sera para vivir con vos.
¿lo harás?¿te espero?
ay amor! me estoy muriendo, muriendo
¿por qué mierda en las despedidas sos terriblemente dulce?
te escribo en una pared:
sos el padre de los hijos que aun no tuve
(espero te des cuenta antes que todo muera)
domingo, 13 de diciembre de 2009
martes, 8 de diciembre de 2009
lunes, 7 de diciembre de 2009
Visión a través de una ventana
Detrás de los cristales desplaza una certeza solar
y sabe que no morirá. Hembra joven
en un cuarto dorado desvestida.
Las manos ondulan hacia el pelo
y bajan por el pecho hasta palpar el vientre
donde la luz curvada gana espacio.
Primicia ritual de la especie
así ha medido su carne matinal
guiada por un pensamiento
que acumula futuro. Habrá universo sucesivo
a partir de ella, tan colmado
instrumento de afirmación: su gesto
no tendrá fin, su pulsación
de madre interminable.
(J.G.)
domingo, 6 de diciembre de 2009
PASAR
Quiero y no quiero
busco
un aire negro un cieno
relampagueante
un alto
una hora absoluta
mía ya para siempre.
Quiero y no quiero
espero
y no
y desespero
y por veces aparto
con todo olvido todo abandono toda
felicidad
ese día completo
esa huida ese más
ese desdén entero
esa destituida instancia
ese vacío
más allá del amor
de su precario don
de su no
de su olvido
esa puerta sin par
el solo paraíso.
Quiero y no quiero
quiero
quiero sí y cómo quiero
dejarlo estar así
olvidar para siempre
darme vuelta
pasar
no sonreír
salirme
en una fiesta grave
en una dura luz
en un aire cerrado
en un hondo compás
en una invulnerable
terminada figura.
Idea Vilariño
viernes, 4 de diciembre de 2009
miércoles, 2 de diciembre de 2009
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